"El amor de Dios al hombre, en el Antiguo Testamento, aparece primero como un amor al pueblo elegido en su totalidad. Más tarde surge la idea de que un Dios ama a cada individuo; y este desarrollo posterior es el que esclarece el contenido de la idea"
T.W. Manson
("Cristo en la teología de Pablo y Juan", Ediciones Cristiandad,Madrid, 1975: 127 s.)
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